viernes, 24 de enero de 2014

jamito........

La maestra tropieza, cae y se pega flor de golpe en el salón de clases. En la caída, el vestido se le sube hasta la cabeza. Se levanta inmediatamente, muy enojada, se arregla y pregunta a sus alumnos:
- Luis, qué es lo que viste?
- Sus rodillas, maestra.
- Una semana de suspensión!
- Y vos, Carlitos?
- Sus caderas, señorita.
- Un mes de suspensión…
- Y vos, Jaimito?
Jaimito toma sus cuadernos y mientras va saliendo del salón de clases, dice:
- Bueno, compañeros, hasta el año que viene!

a la gallega....

¿Por qué los gallegos se sientan en la última fila cuando van a ver películas cómicas?.
Porque el que ríe último, ríe mejor.

mejor la abuelita...

 Esta un niño muy apurado. Y dice abuelito. Abuelito kiero hacer pipi andale mijo. Vamos. No mejor k vaya mi abuela conmigo xq a ella le tiembla mas la mano!!!

sin tetas no hay paraíso.

Llegan dos mujeres al cielo y una le pregunta a la otra:
-¿Como te moriste?
-Congelada.
-¡Ay, que horror! ¡Debe haber sido horrible! ¿Cómo es morir congelada?
-Al comienzo es muy feo: primero da escalofríos, después dolores en los dedos de las manos y los pies, todo congelando... Pero, después vino un sueño muy pesado y perdi la consciencia. ¿Y tu, como moriste?
-¿Yo? De un ataque cardíaco. Estaba desconfiando que mi marido me engañaba. Un dia llegué a casa mas temprano. Corri hasta el dormitorio y el estaba en la cama viendo televisión.
Desconfiada, corrí hasta el sótano, para ver si encontraba alguna mujer escondida, pero no encontre a nadie. Corrí hasta el segundo piso, pero tampoco vi a nadie. Subí hasta el desván y al subir las escaleras tuve un ataque cardíaco y cai muerta.
-Oh, que pena... Si hubieras buscado en el congelador, las dos estaríamos vivas...

el profeta idiota....

Un tipo toma un taxi y le dice al chófer
:- Señor, por favor apáguese la radio, ya que mi religión no me permite escuchar música porque en el tiempo del profeta no había música ni radio.
El taxista, lo ve medio enojado y apaga la radio, prende un cigarrillo, y el tipo, le toca el hombro
:- Señor, por favor apague el cigarrillo, mi religión no tiene vicios, ya que el profeta no tenía ningún vicio.
El taxista enojado detiene el auto, se baja y abre la puerta del pasajero… El tipo intrigado, le pregunta:- ¡Oiga! ¿Qué hace usted?
- Bájese del taxi, en el tiempo de tu profeta no habían taxis, ¡así que se baja de mi auto y espera un camello por idiota.

el arbitro....

Un muchacho, tocó a la puerta de la casa de su novia. Tuvo el tino de abrir el Padre de la muchacha-
¿Qué desea, jóven?
- Pues verá, vengo a hablar con usted.
- Bueno, pues, pase jóven, vayamos a la sala y ahí me cuenta de qué quiere hablar conmigo.¿Y bien?
El jóven, todo decisión, respondió:- Mire usted, vengo a comunicarle que a su hija y a mí nos gustaría compartir nuestras vidas, nos queremos casar.
El señor sonrió.- Pues está muy bien eso de que se casen, pero cuénteme, muchacho, ¿ya cuenta con un salario digno para poder sustentar a mi hija y los hijos que vengan?
El jóven, con todo el aplomo del mundo, contestó:- Mire, aunque soy Ingeniero titulado, no gano mucho. Sin embargo, su hija me ha comunicado lo que ganan su distinguida esposa y usted. Por lo cual, confío en tener una pequeña ayuda de ustedes para poder pagar el teléfono, el agua, la luz y el supermercado.
Un poco sorprendido por la respuesta, el Padre hizo otra pregunta:- Bueno, ¿y piensan comprar un apartamento o una casa? ¿O prefieren alquilar..?
El jóven, con mirada inocente, contestó:- Si antes le pedí una pequeña ayuda para poder ir viviendo, hemos pensado que, como esta casa es muy grande y pueden vivir perfectamente dos matrimonios, no es necesario comprar o alquilar apartamento o casa. Deseamos vivir en esta casa con ustedes.
El señor, desconcertado por la actitud del muchacho, continuó con el interrogatorio:- Dígame algo, ¿tiene automóvil?
El jóven, sonriendo, respondió:- Mire, no tengo coche porque he estado pensando que si usted tiene tres, para qué vamos a comprar uno más. Usted nos deja el que les sobra y así no es necesario adquirir otro.
En ese instante, entró en la sala la Madre de la novia, quien, mirando primero al jóven y luego a su esposo, preguntó cordialmente:- ¿Se puede saber de qué hablan?
El esposo respondió:- Querida mía, qué bueno que llegas, quiero presentarte al Señor Arbitro, quien pretende ser el futuro marido de nuestra hija..
El joven, desconcertado y molesto, dijo:- Oiga, ¿por qué me llama Señor Arbitro?
A lo que el presunto suegro contestó:-Y bueno, grandísimo hijo de p....., ¿cómo demonios quieres que te llame si hasta ahora lo único que vas a poner en esta casa es el pito?